domingo, 2 de agosto de 2009

Petunia Electricista

Hoy me tengo que poner seria porque la más reciente ocupación de la Señorita Petunia nos ha costado un disgusto y una visita al veterinario...


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Hace un mes y pico tuve que llamar al electricista de urgencia por la noche porque saltaba el cuadro de luz. Tras más de una hora de revisar todo encontró que un enchufe (donde tenía el ordenador) hacía cortocircuito con el cable a tierra (o algo así) y acabamos matando dicho enchufe para evitar problemas y poniendo el ordenador y todo lo demás en otro sitio. Esta semana por fin llamé a la casera por la factura, ya pensando que estaba todo solucionado. El jueves por la mañana vuelve a saltar... lo subo, y me voy a trabajar pensando que me tengo que buscar otro sitio porque aquí ya no me siento segura, etc etc.

Cuando vuelvo por la noche me encuentro a Petu encerrada en la habitación (normalmente la dejo en el salón, la habitación la tiene prohibida). La pobre se ha colado en un descuido y ha pasado todo el día sin comida ni agua... La miro y veo que tenía como pelusas en los morros... La miro más de cerca y veo que tenía todo el pelo y los bigotes chamuscados! Pero como? Con qué? Busco en todos los rincones de la habitación y no veo nada, ningún cable mordido, ningún enchufe caido... Pero el animalito se ha quemado con algo.

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Ya me voy a dormir mal porque me entra la paranoia de que algo pasará de noche y acabaré saliendo en las noticias por haber muerto quemada vivia (sí, soy un poco dramática, que pasa?). El Viernes por la mañana vuelve a saltar el cuadro de luz. Estoy que ya no puedo más.

El Viernes además tenía que llevar a Petunia a conocer a Virgola (la mascota de una compañera de trabajo, ya os lo contaré) así que aprovechaba y luego ibamos al veterinario. Cuando la vió me dijo que definitivamente había lamido un enchufe y que había tenido suerte porque él había visto conejitos con todo el morro quemado, las encias quemadas y cosas peores que ni voy a contar porque me pongo mala solo de pensarlo. A Petu se le quemaron los bigotes y un poco el esmalte de un dientito (que lo tenía negro). Hay ronda de vacunas y jarabes y nos vamos a casa, yo ultra preocupada y Petu enfadadísima conmigo.

El Sábado por la mañana me tocaba limpieza general (la semana que viene tengo visitas de vacaciones y hay que estar presentable) y moviendo muebles me encuentro con el culpable. El cable que quemó a Petunia. El maldito, el provocador que seguramente le gritó "muerdeme!" para luego poder quemarle los morros....


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Así que reconstruyendo los hechos lo que pasó es lo siguiente: jueves por la mañana Petu se cuela en la habitación y con todo el entusiasmo y las prisas porque pensaba que la quitaría pronto, se pone a morder cables como loca. Topa con un cable con pinta muy apetecible, le pega el gran mordisco y el cable la ataca con furia. Saltan chispas (y salta el cuadro de luz), se quema los morros y sale corriendo asustada. Pero la puerta está cerrada, así que se queda todo el día debajo de la cama, asustada... Pobrecita mía.

Como no encuentro el cable, sigue enchufado, derretido como está y provocando cortocircuitos. El Viernes vuelve a saltar la luz... Milagrito del niño jesús que no ha provocado un incendio. Lo "bueno" es que no fue culpa de la instalación...

Petunia ha estado rarísima estos días, claro. Aún con el susto en el cuerpo... Cuando le he preguntado por qué había ido a morder cables cuando sabe que lo tiene prohibido, me ha dicho que sabía que llevamos tiempo con problemas en la instalación y que ella sólo quería ayudar...

Angelito... a partir de ahora no se sale de casa sin comprobar que Petunia está en la "zona segura".

4 comentarios:

Renaissance dijo...

¡Pobre Petunia!
Los conejitos estos deben dar un trabajo terrible con la manía de roer.

Natleika dijo...

La verdad es que sí... hay que estar con mil ojos. Pero vale la pena =)

Radek dijo...

Pues se not aque le pego un buen par de mordidas al cable.

Menos mal que solo fueron los bigotes.

Natleika dijo...

si tio, que penita...